Vega's Blog

Hedy Lamarr

Índice

  1. Frase conocida
  2. Vida
  3. Hedy Lamarr en la ciéncia
  4. Webgrafia

Frase conocida

"Cualquier chica puede ser glamurosa. Todo lo que tienes que hacer es quedarte quieta y parecer estúpida."

Vida

Hedy Lamarr nació en Viena el 9 de noviembre de 1914 como Hedwig Eva Maria Kiesler. Fue la única hija de un banquero de Lemberg y una pianista de Budapest que, aún siendo de origen judío, se habían criado en el catolicismo. En el colegio, destacó por su brillantez intelectual siendo considerada por sus profesores como superdotada. En casa, creció escuchando las interpretaciones de su madre al piano y ella misma, desde pequeña, tocó este instrumento a la perfección. Compleja e inquieta, abandonó los estudios de ingeniería, decidida a cumplir el sueño de ser actriz. Su descubridor, el empresario y director de teatro y cine Max Reinhardt, la llevó a Berlín para que se formase en interpretación, tras lo cual, regresaron a Viena para empezar a trabajar en la industria del cine.

Después de aparecer, completamente desnuda, en la película checa Éxtasis (1933),el estreno de este filme la hizo mundialmente famosa, posibilitando en 1938 su traslado a Hollywood. Con la >Metro Goldwyn Mayer protagonizó muchos títulos sin alcanzar grandes éxitos, por lo general en papeles de mujer misteriosa; pese a su exquisita belleza, sus dotes interpretativas eran limitadas.Su película de mayor repercusión fue Sansón y Dalila (1949), una de las grandes superproducciones de Cecil B. DeMille; a partir de entonces su carrera experimentó un rápido declive, hasta su retirada en 1957.Se despidió de la gran pantalla con dos cintas de escasa relevancia, The Story of Mankind y The Female Animal.

Alejada de la industria, Hedy Lamarr pasó apuros económicos y fue testigo de la subasta de todos los bienes de su casa de Beverly Hills. En 1966 fue acusada de robo en un supermercado y, aunque finalmente salió absuelta, la publicación ese mismo año de su autobiografía, Ecstasy and Me, no contribuyó a mejorar la imagen de quien había sido una de las mujeres más bellas de la historia del cine. El libro recogía con minucioso detalle los escándalos amorosos y sexuales de la actriz y, aunque Hedy Lamarr demandó a la editora por falsear su azarosa vida sentimental, Hollywood le dio definitivamente la espalda.

A pesar del triste final de su vida, Hedy Lamarr pasó a la historia no sólo por su aportación al séptimo arte, sino también por sus descubrimientos en el campo de la defensa militar y de las telecomunicaciones.Durante la Segunda Guerra Mundial ideó, junto a su amigo el compositor George Antheil, un sistema de detección de los torpedos teledirigidos utilizados en la contienda. Inspirado en un principio musical, el invento funcionaba con ochenta y ocho frecuencias, equivalentes a las teclas del piano, y era capaz de hacer saltar señales de transmisión entre las frecuencias del espectro magnético. Una vez patentado, Estados Unidos lo utilizó por primera vez durante la crisis de Cuba, y después como base para el desarrollo de las técnicas de defensa antimisiles.

Hedy Lamarr en la ciéncia

Hedy Lamarr fue: la inventora de un sistema secreto de comunicaciones, femme fatale, cleptómana, políglota, posiblemente espía y experta en arte. Aprovechó su cautiverio domiciliario, causado por su marido, para continuar sus estudios de ingeniería y para obtener de los clientes y proveedores de su marido, que nada sospechaban, informaciones sobre tecnología armamentística de la época.

Lamarr, conocedora de los horrores del régimen nazi a través de su marido Mandl, próximo al fascismo, y por su condición de judía, ofreció al gobierno de los Estados Unidos toda la información confidencial de la que disponía, gracias a los contactos de su exmarido. Además, consideraba que su inteligencia podía contribuir a la victoria aliada. Así, se puso a trabajar para el desarrollo de nuevas tecnologías militares.Hedy Lamarr y el compositor George Antheil recibieron el número de patente >2.292.387 por su Sistema de comunicación secreta.
Esta versión temprana del salto en frecuencia, una técnica de modulación de señales en espectro expandido, usaba un par de tambores perforados y sincronizados (a modo de pianola) para cambiar entre 88 frecuencias, y se diseñó para construir torpedos teledirigidos por radio que no pudieran detectar los enemigos.El primer uso conocido de la patente se dio en la crisis de los misiles de Cuba. Durante esta crisis de 1962 se usó este sistema en el control remoto de boyas rastreadoras marinas. La misma técnica se incorporó en alguno de los ingenios utilizados en la guerra de Vietnam y, más adelante, en el sistema estadounidense de defensa por satélite, hasta que en la década de 1980, el sistema de espectro expandido vio sus primeras aportaciones en ingeniería civil. Así, con la irrupción masiva de la tecnología digital a comienzos de esa misma década, la conmutación de frecuencias permitió implantar la comunicación de datos WIFI.

Hedy Lamarr
Hedy Lamarr